Como dicen en Juego de Tronos, Winter is Coming, y con el invierno, algo muy apreciado por nosotros los navarros y algunas de nuestras comunidades limÃtrofes, el sabor de un buen cardo.
Posiblemente, el cardo no es excesivamente compatible con los tiempos modernos, que piden mÃnima o nula preparación. Hay que emplear tiempo en limpiarlo y tiempo en cocerlo. Y posiblemente, sólo a las personas que les gusta verdaderamente la verdura y saben apreciar su valor están dispuestas a invertir su tiempo en estas tareas. Resulta mejor adquirir dos cardos pequeños que uno grande, ya que los de menor tamaño son más sabrosos. Sin embargo, si tenemos un cardo grande, hay que valorar cocerlo en dos tandas. Requiere casi una hora de cocción en olla normal y se corre el riesgo que las pencas del interior mucho más tiernas y blancas.
Para preparar un buen cardo de forma tradicional
- Freir en una cazuela con aceite unos dos o tres dientes de ajo muy finamente picados, sin que lleguen a coger color.
- Añadir un puñado de almendras y un poco de harina y remover.
- Echar el caldo de cocción poco a poco, para que la harina se vaya ligando, como si se preparase una bechamel y dejar hervir unos 5 minutos.
- Comprobar el punto de sal y triturar todo en la batidora.
- Volver a poner la salsa en la cazuela, incorporar el cardo y otro puñado de almendras tostadas.
Fuente: SaborMediterraneo.com